Sábado, 15 de noviembre de 2025. 19:30 h
Palabras de Federico Rodríguez Pérez
¿CÓMO EMPEZÓ TODA ESTA HISTORIA DE MI COLECCIÓN?
Pues el responsable fue el Presidente de TYLDET, ese señor que ven ahí tan formalito, íbamos a un rastro y me decía: Mira este disco de música canaria, sólo vale 1€, te lo compro, sabiendo mi interés por este tema.
Así que cada vez que visitábamos esos lugares lo primero que buscábamos eran los puestos de venta de vinilos, cuando me quise dar cuenta ya tenía 200.
Luego, me entero que hay páginas en internet que sólo venden vinilos y me pasé muchísimas horas mirando, fue entonces cuando comenzaron los problemas; algunos vendedores no enviaban a Europa, así que me puse en contacto con un primo de Marisa, que vivía en Canadá, el disco lo enviaban a su casa y luego él me lo mandaba. Otros que enviaban a Europa, pero no a España, pues el pedido iba a casa de mi hijo Néstor en Alemania. También estaban los que exportaban a España, pero no a Canarias, pues entonces a casa de mi cuñada en Madrid. En fin, siempre buscando la forma de conseguir ese disco que me interesaba. Igualmente tenía unos amigos en Caracas que me ayudaron a conseguir algún que otro vinilo.
¿DE QUÉ PARTES DEL MUNDO VINIERON LOS DISCOS?
Imposible de imaginar cómo pude comprar vinilos de lugares tan remotos como Islandia, Argentina, Estonia, Australia, Francia, Italia, Alemania, Austria, Grecia, Irlanda, Reino Unido, Suecia, Finlandia, Noruega, Sudáfrica, Brasil… pero sobre todo de Cuba y Venezuela. El último que compré vino de LA UCRANIA EN GUERRA, ¡Increíble!
MI GRAN PREGUNTA: ¿CÓMO LLEGÓ NUESTRA MÚSICA CANARIA A ESOS PAÍSES?
Es muy fácil de imaginar el turismo y otros, también puedo suponer que los compraron marineros que pasaban por el Puerto de La Luz y se los llevaron a lugares que jamás pensé podrían guardar vinilos de música de nuestra tierra.
¿ME LLEVÉ MUCHAS DECEPCIONES?
Pues sí, alguna que otra, por ejemplo, comprar un disco que me hacía mucha ilusión y cuando llegaba a mis manos la carátula era la correcta, pero el vinilo que venía dentro era de Manolo Escobar, o al revés el vinilo era correcto pero la portada era de un grupo de sardanas o de jotas.
¿FUERON CAROS LOS VINILOS?
Algunos sí, un simple vinilo de 2 canciones 50€, a veces lo que encarecía el disco era el empaquetado y el transporte, ahí creo que muchos se aprovechaban, pero no tenía otra opción, si te lo pensabas mucho cuando te decidías ya había desaparecido del mercado.
No quiero ni pensar en el dinero invertido. Ya ni miro esas páginas de venta, creo que he agotado el mercado.
¡MENUDO NEGOCIO EL DE LAS DISCOGRÁFICAS!
Y si les digo que Los Sabandeños, todas las navidades sacan el mismo vinilo con diferente portada. Siempre las 3 mismas canciones: ISAS Y ESTRIBILLOS, LO DIVINO, TAJARASTE LAGUNERO.
EL TRABAJO DE DOCUMENTACIÓN
Un Excel diseñado por Francisco Pérez, no le falta detalle, solo se le olvidó poner que debía especificar la tienda donde se compró el vinilo. Los apartados que tenía que rellenar de cada disco: Autor, Título, Lugar de Edición, Discográfica, Editor, Depósito Legal, Formato. Fecha de creación, Canciones de la cara A, la Cara B también, Observaciones. Se digitalizaron todos los discos, canción por canción y cada una de ellas totalmente documentada.
FINALMENTE
- Quiero expresar mi gratitud, a todas las personas que me han ayudado en esta aventura, que empezó como un juego y miren como ha terminado.
- Especialmente a Marisa y a nuestro hijo Álvaro que ha sido el motor para las compras, cuando me decían pagar por Pay Pal o Bizum, yo no sabía ni sé que es eso, pero el resolvía esos asuntos, transferencias y negociar el precio cuando era el caso.
- Así mismo a Verónica, la cartera de mi zona, siempre muy risueña, agradable y cariñosa en sus entregas.
- A Oliver Saavedra Domínguez, que lo conocí accidentalmente al comprarle varios discos y terminamos siendo amigos, luego ya no me vendía, me regaló bastantes que veía anunciados en su página o consultaba conmigo antes de publicarlos.
- También mi agradecimiento a Tyldet, colectivo al que me enorgullece pertenecer, porque una exposición como esta no se materializa por arte de magia, es el resultado de la generosidad y el compromiso de muchas personas que dedican su tiempo de ocio a poner en valor nuestras tradiciones culturales.
- Entre estas personas está Francisco Pérez que realizó la digitalización con la ayuda de los miembros de la Coordinadora: Antonio Sanabria, Miguel Vega, Ana Moreno y Beni Rodríguez, que así mismo participaron en la edición, documentación y montaje de esta exposición.
- Gracias también por el magnífico catálogo que se ha imprimido y por la enorme cantidad de tiempo que se ha dedicado a preparar todo, intentando que no falte ni el más mínimo detalle.
- Y también a la FEDAC, Cabildo de Gran Canaria que ha financiado los gastos de la exposición y catálogo.
Gracias y mil gracias.